Pasa que son tantas las cosas que me gustan como las que detesto. Y no me como más el viaje de "si pongo en la balanza..." porque la balanza es super inestable y la gente no está hecha de plomo. Me resulta imposible comparar pesos (o masas para ser específicos). Entonces hago el esfuerzo que con práctica se convierte en algo tan efímero y natural que pierde el carácter de sacrificio: Aceptar, entonces se redistribuye el peso; deja de ser cuestión del otro porque NO HAY OTRO. Sólo hay uno. Uno de mi en el otro. Uno del otro en mí. Y ahí está la esencia, ahí hay levedad; no hay peso. Hay ser. Ya no se si llamarlo amor. Y ojo, que no me quiero hacer el que llegó al nirvana. No se puede estando vivo, pero al menos intento no mentirme tanto. Y pasa que se te desdibuja una línea jodida, porque la vida deja de tener los sentidos que estamos acostumbrados a darle. El ser, ¿es nihilista? ¿¡Qué se yo!? ES. No hay mucha vuelta. El problema es darle significado a la verdad en si. Decir que es bueno o que es malo. M. M. decía que Descartes se equivocó. Yo vi una peli sobre Descartes y la verdad es que era un bajón, así que comparto. "Pienso, luego existo". Pobre. Yo todavía estoy en el ciclo del amor. Pero perdí la pasión. Me "karmatiza". Me aleja. Me desapega. Pero por ahí dicen que eso está bueno.
Nunca me sentí mejor, por eso "ésta es la última vez que vivo" (es mi mantra budista). También podría decir que "Solo se vive una vez" (una cárcel -convicción- cada vez más abierta a razón de la fe).
Si. Escucho voces. Ahora voy a pensar que ustedes piensan que soy esquizofrénico. Si bueno… un poco capaz. Pero intento disimular, como todos. Voces. Voces que me dicen algo de Newell’s. Puro chamuyo. No entiendo nada. Dicen algo de “duro”. Que se yo… Más política en el deporte. Es guita nomás. No Newell’s… TODOS.
lunes, 25 de julio de 2011
Boddhisattva
Desear de corazón el bien y la felicidad de todos los seres. Reflexionar acerca de los impulsos egoístas motores del "amor" que pretendo ofrecer.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)