miércoles, 8 de diciembre de 2010

Flashes IV

Las promesas de cambiar no importan; nos amamos más allá de las formas.

A pesar de tu odio subconsciente y tu orgullo resentido yo te quiero igual así.

lunes, 6 de diciembre de 2010

Humos reveladores existenciales (R.V.)

Como cuesta vivir el ahora. En la cama escuchando clichés no podía conectar. Pero el recuerdo es hermoso. Ahora tengo miedo. Por eso me alejo. Voces por celular que se contagian de asiento en asiento. Excusas. Palabras al pedo. Dispersión obligada para ensordecer los pensamientos. Mostrarse. No sentirse solo. No escucharse. Darte cuenta de la infelicidad viciosa del infeliz conectado. Del lap-top. Top. Yo quiero alguien que me haga reír. Yo me quiero reír para no aburrirte. Encima: lo que faltaba. Una película de Stallone con un chino y el pelado de mierda este que nunca pierde ni se muere. Ese de "el transportador".

Flashes III

Es que cuando vimos esa película no teníamos que olvidarnos.

Me autoboicotean los recuerdos.

O sos independiente o no te importa un carajo.

Una señal de la cruz es síntoma para psiquiatra.

Los pooles son nihilistas.

Es que las ideas fluyen pero tengo los canales cerrados. En cualquier momento me sale un diarrea de ideas...

TOC

Puertas que se golpean porque están mal cerradas. Hacen ese ruido que no te deja dormir. Y a veces no sabés qué es mejor: si abrirlas del todo o cerrarlas bien. Yo les pongo una zapatilla entre medio para que no golpee y corra el aire; no haga ruido. Ese aire con luz del otro lado. Porque abrirla del todo te enceguece. Cerrarla te asfixia. La zapatilla deja pasar al otro lado. Que el sueño y la luz se compartan. Que la noche no sea tan noche. Siempre sabés lo que te espera del otro lado de esa puerta: Está la salida.